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El solar tiene una superficie total de 21.386 m2, con forma casi rectangular y un desnivel de 9 metros aproximadamente, con pendiente en dirección noroeste.
El proyecto se realizará en un terreno aislado con mucha naturaleza alrededor, por lo que la propuesta de diseño podía tirar por dos caminos: integrar el edificio en la naturaleza, o convertirlo en un elemento totalmente externo a ésta, simulando un helicóptero que se posa sobre el terreno. Finalmente se optó por ésta última.
La cubierta se hizo de tipo fría ventilada, constituida por elementos de pendiente con vigas preformadas de acero laminado, sobre las cuales se colocaron las correas que servirían de soporte al aislamiento térmico y la cobertura. Ésta se ejecutó con paneles de chapa plegada de pendiente variable.
Se hizo mucho hincapié en que fuera todo muy luminoso, por ello la fachada del módulo de habitaciones se solucionó con grandes cristaleras. Además, orientamos las habitaciones hacia el sur para que fueran cálidas.
